UNA NAVIDAD DIFERENTE | HISTORIAS SOBRE RIELES
Una mesa navideña que bailó al ritmo del traqueteo del tren
Cenas improvisadas con fernet y pan dulce. Algunos jóvenes mochileros eligieron pasar una Nochebuena diferente. Calor, amigos, guitarras y muchas ganas de viajar.
AL NORTE. Numerosos mochileros pasaron la Nochebuena viajando en tren.
A la 0 se abrazaron, brindaron con fernet y cenaron con pan dulce en un vagón del tren en el que venían desde Buenos Aires hacia Tucumán. Así pasaron la NochebuenaFrancisco Rampini, Carolina Rodríguez y seis mochileros más con los que recorrerán el norte del país hasta llegar al lago Titicaca, en Bolivia, para Año Nuevo.
Un centenar de jóvenes con sus mochilas, pocas familias y algunas personas solas fueron los pasajeros que arribaron en la mañana de Navidad a Tucumán.
"El viaje estuvo bueno, pero igual estamos muy cansados. Intentamos millones de posiciones para dormir, pero no pasó nada", contó Rampini. "Estamos desvelados", agregó Carolina.
Durante la madrugada los acordes de una guitarra y la melodía de una flauta sirvieron, por un rato, para olvidar las incomodidades y el constante traqueteo. "Sólo nuestro vagón quedó iluminado y pudimos extender el festejo hasta que un guardia nos dijo, de buena manera, que la mayoría de los pasajeros ya estaba durmiendo", comentó el mochilero.
"Si hay que pasar las fiestas arriba de un tren no hay drama", contó Martin Rosset, otro mochilero que llegaba desde Rosario con su hermano Santiago. "Nuestra familia nos apoya; es más, ellos nos llevaron hasta la estación", aclaró el joven rosarino.
"Para mí las fiestas son unas fecha más del calendario", sugirió Gabriel Muñoz, quien junto aLeticia Merea y Marcos Salvatierra emprendió por primera vez el desafío de ser mochileros. "No nos quedaba otra que viajar para esta fecha, porque ya no había más pasajes", aclaró Leticia. Los chicos confesaron que no hubo mucho clima de festejo en su vagón porque la mayoría iba quebrada por el calor y las luces eran muy tenues.
Amparo, Margarita, Aldana y Nadia también pasaron la Nochebuena en tren. "Sólo conseguimos pasaje para el 24", contaron las jóvenes, quienes armaron el itinerario con el objetivo de conocer a fondo el norte de Argentina.
"Tenemos 21 días para recorrer Tucumán, Salta y Jujuy. Trajimos lo básico para usar y cocinar porque la idea es ir de un lugar a otro", explicaron.
Un centenar de jóvenes con sus mochilas, pocas familias y algunas personas solas fueron los pasajeros que arribaron en la mañana de Navidad a Tucumán.
"El viaje estuvo bueno, pero igual estamos muy cansados. Intentamos millones de posiciones para dormir, pero no pasó nada", contó Rampini. "Estamos desvelados", agregó Carolina.
Durante la madrugada los acordes de una guitarra y la melodía de una flauta sirvieron, por un rato, para olvidar las incomodidades y el constante traqueteo. "Sólo nuestro vagón quedó iluminado y pudimos extender el festejo hasta que un guardia nos dijo, de buena manera, que la mayoría de los pasajeros ya estaba durmiendo", comentó el mochilero.
"Si hay que pasar las fiestas arriba de un tren no hay drama", contó Martin Rosset, otro mochilero que llegaba desde Rosario con su hermano Santiago. "Nuestra familia nos apoya; es más, ellos nos llevaron hasta la estación", aclaró el joven rosarino.
"Para mí las fiestas son unas fecha más del calendario", sugirió Gabriel Muñoz, quien junto aLeticia Merea y Marcos Salvatierra emprendió por primera vez el desafío de ser mochileros. "No nos quedaba otra que viajar para esta fecha, porque ya no había más pasajes", aclaró Leticia. Los chicos confesaron que no hubo mucho clima de festejo en su vagón porque la mayoría iba quebrada por el calor y las luces eran muy tenues.
Amparo, Margarita, Aldana y Nadia también pasaron la Nochebuena en tren. "Sólo conseguimos pasaje para el 24", contaron las jóvenes, quienes armaron el itinerario con el objetivo de conocer a fondo el norte de Argentina.
"Tenemos 21 días para recorrer Tucumán, Salta y Jujuy. Trajimos lo básico para usar y cocinar porque la idea es ir de un lugar a otro", explicaron.
Fuente: La Gaceta Tucuman- 26.12.10